Cuando una mujer ejerce la maternidad, parte de creencias influidas por su crianza y por la cultura en la que creció. De esa manera consolida una forma de actuar en la relación con sus hijos.
A partir de la práctica clínica, de lo escuchado en sesiones, describire algunas ideas que llevan a las mujeres a diversas expresiones emocionales y conductas al ejercer la maternidad.
– “Una mujer no debe cambiar en nada su forma de vida al ser madre”.
Esta idea surge en mujeres que generalmente ejercen una actividad laboral que les encanta y tienen estabilidad económica, por ello les gusta asistir a su centro laboral durante ocho horas o más de lunes a viernes y viajan por trabajo varios días al mes. Además, dedican tiempo a reunirse con amigos y familiares sin la presencia de hijos. Conservan varias horas a la semana para las salidas en pareja o para conocer potenciales parejas en el caso de ser solteras. Cuando sus hijos tienen menos de 1 año, pueden viajar con ellos en avión a otros países, ir al estadio a ver un partido cuando la pareja gusta del futbol y las persuade, ir a un congreso profesional, ir a reuniones amicales o familiares hasta la media noche. Y todo esto puede significar cambios en los hábitos de alimentación y sueño de todos los integrantes de la familia.
El pensamiento principal es: “no quiero cambiar el número de horas que dedico a mis actividades laborales, amicales, familiares por el hecho de ser mamá”.
- “Una madre le dedica todos sus momentos libres a sus hijos”
Hay algunas mujeres que trabajan de manera independiente en un área que les gusta y deciden la cantidad de horas destinadas a pasar tiempo con sus hijos, pero perciben que ese tiempo es muy corto al deseado o esperado, y podrían surgir sentimientos de culpa cuando deciden dedicarle tiempo a salidas con la pareja y/o amigos. Prefieren las salidas con familias que tengan hijos para ver a sus hijos interactuar con otros menores.
Estas mujeres piensan que todas las horas de todos los fines de semana deben ser para interactuar con los hijos. Si es Madre Soltera por Elección (MSE) suele pensar: “ya tuve parejas, ahora solo quiero dedicarme a mis hijos”. Si es una madre separada, muchas veces suele aceptar rápidamente que la ex pareja no visite con frecuencia a los hijos y pensar similar a la MSE.
El principal pensamiento es: “yo debo estar presente en la vida de mis hijos la mayor cantidad de tiempo”
– “Una mujer que es madre debe seguir dedicando mucho tiempo a la pareja”
Otras mujeres suelen estar pendientes de los gestos románticos expresados por la pareja. Suelen esperar que los gestos románticos sean los mismos que en los inicios de la relación de pareja. Y al margen de la frecuencia de los gestos de la pareja, quieren dedicar muchas horas del día y del fin de semana a la relación de pareja. Cuando la pareja piensa igual, los hijos ven solo algunas horas a la semana a los padres, y puede ser que lo asuman como “ese es el concepto de paternidad/maternidad/familia” o puede ser que se sientan tristes o molestos ante las ausencias. En todo caso, para las madres que tienen esta idea, sería preferible que desarrollen un equilibrio entre su maternidad y su pareja, y se pregunten: “¿Qué mensaje estoy transmitiendo a mis hijos sobre el concepto pareja y familia?
“Una mujer primero es madre y luego pareja”
Existen muchas ideas respecto a cómo se percibe una mujer en su rol de madre cuando está en pareja, una muy frecuente es: “ya que soy madre debo dedicar más tiempo a este rol porque he cambiado mis prioridades”
Alegan que el concepto de familia no incluye pasar tiempo en pareja porque “cuando hay hijos, la pareja pasa a otra etapa”, por ello no esperan la participación de la pareja en la crianza de los hijos, es decir si la pareja no participa no la persuaden a ello.
Esta conducta implica no prestar atención a los mensajes que se transmiten sobre el concepto familia. Y cuando estas madres no tienen pareja, esta idea fundamenta muchas veces el estar “muy atentas” a sus hijos, sin desarrollarse en las otras áreas de su vida.
Quizá estés pensando que no te identificas con ninguno de estos pensamientos, es válido; seguro hay y habrá muchas variantes en el concepto de madre, incluso en aquellas mujeres que durante décadas tuvieron un determinado pensamiento.
En general, observamos que hay muchas ideas respecto a la maternidad, algunas tienen mayor impacto e influencia en la formación de la personalidad de los hijos, pero nunca podremos generalizar que determinada conducta de las madres/padres determino 100% las de los hijos.
En todo caso te invitamos a reflexionar, a que te hagas algunas preguntas y decidas o no un cambio en tu estilo de maternidad. He aquí algunas: ¿Con cuál modelo te identificas?, ¿qué emoción te produce reconocer que piensas así?, ¿Cómo quieres ser en adelante?
Adela Jara Del Águila Psicoterapeuta de Pareja y Familia